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El mango, mejor si tiene acento andaluz.


Las frutas tropicales han ido perdiendo su trópico. Para comprar mangos, aguacates, papayas o chirimoyas, frutas tradicionalmente cultivadas en África, India o América Latina, no hace falta moverse de la ciudad. Ni si quiera del barrio. Basta con acercarse a cualquier supermercado y escoger al gusto.


Pero ¿y si esa exótica pieza de fruta se hubiese recolectado pocas horas antes a no muchos kilómetros de tu casa? ¿Seguiría conservando el toque tropical aunque tuviese acento andaluz?

Hablamos del mango cultivado en la comarca malagueña de la Axarquía y en la Costa Granadina, unas zonas que en los últimos años se han ido consolidando como ‘huerto Europeo’ de las frutas tropicales. Originario de la India, el mango no soporta las bajas temperatura, lo que supone un problema para su exportación.


Por este motivo, desde hace al menos cuatro décadas muchos agricultores andaluces aprovechan el caluroso clima de la zona para cultivar aguacates y, sobre todo cuatro variedades de mango: Keitt, Osteen, Kent y Tommy Atkins.


Solo en 2017 se exportaron más de 32.500 toneladas de mango destinadas en su totalidad (96%) a países de la Unión Europea


El éxito que ha alcanzado esta fruta de la costa subtropical andaluza se traduce en un cada vez mayor número de exportaciones. Según datos recogidos del Observatorio de Precios y Mercado de la Junta de Andalucía, sólo en 2017 se exportaron más de 32.500 toneladas de mango destinadas en su totalidad (96%) a países de la Unión Europea.

Con la buena acogida internacional, no sorprende que las fincas andaluzas hayan aumentado su producción, incrementando a su vez el número de ventajas para el consumidor de frutas tropicales.

Sin olvidar los beneficios que de por sí aporta el mango, rico en vitaminas y con propiedades diuréticas y laxantes, esta fruta ya autóctona en España tiene un característico sabor dulzón. Eso sí, siempre y cuando esté maduro. Es precisamente en este aspecto donde el mango andaluz busca marcar la diferencia.


Al contrario de otros países productores que transportan la fruta verde para que madure durante le trayecto, en España se recolecta el mango en su punto óptimo de maduración. De esta manera en 24 o 48 horas el mango está ya en los mercados esperando a que te lo lleves a casa.


En España se recolecta el mango en su punto óptimo de maduración.


El gerente de la empresa comercializadora de frutas tropicales Trópico Spain, Óscar Ramírez sostiene que ese corto lapso de tiempo que pasa entre la recogida y la venta, es el que garantiza que esta fruta sea más sabrosa. Aunque, como es lógico, un mejor sabor se paga y el producto es algo más caro… de momento.


Normalmente, el precio del mango cultivado en Andalucía, -a día de hoy a 1,10 e/Kg, según indica el Observatorio de Precios y Mercados-, es mayor al de los importados. Sin embargo, este último año su precio ha bajado por la sobreproducción que ha obligado a los vendedores a lanzar promociones muy agresivas y a abaratar los precios. Una buena noticia para los compradores, ya que esta tendencia parece mantenerse de cara al futuro.

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